lunes, 9 de enero de 2012

San Miguel

 Volando regresaban a un estado superlativo de la memoria.
 Como en un compás rítmico preciso en lo cromático, del tiempo y los colores.
 Lavan sobre los colores de la paz, innumerables exactos procesos.

 De los olores a menta y a garzas que eructan sobre los techos de los árboles se encuentra un pescadito, dorado en su tamaño, que revolotea entre las aguas del lago de San Miguel del  Monte.

 El galgo que nos acompañaba se llamaba…

Frescas

 Hay garzas morenas entre los frescos de maizales, allá por el lago.
 En los febreros de la siembra, se planta y se crece un Algibe, fruto de la raiz del
 Vientre de su encía.

Le molestaba, se la quería quitar. Luego se arrepintió y mostró cara de desagrado en cada circunstancia que así lo requería.


 Oscilantes las ametralladoras de lo horroroso, se encarnaban en la noche.
 Muertes y más truenos, y truenos desequilibrantes.

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